viernes, 15 de junio de 2018

LAS BAÑISTAS JEAN HONORE FARGONARD

LAS BAÑISTAS 1756

La bañistas
óleo sobre lienzo 64 x 80 cm
Museo Nacional del Louvre, Paris
















Fragonard se convertirá en el máximo representante de la pintura galante y libertina, obteniendo un amplio éxito entre su clientela burguesa. Sus fiestas galantes se alejan del teatro y del carácter misterioso de Watteau y se convierten en escenas campestres, idílicas, en las que se respira una poesía por otro lado bien ajena a la de Boucher. 


Tras su visita a Italia en la que Fragonard establece contactos con Tiépolo , a quien tuvo la oportunidad  de estudiar en Roma que cambiaría el rumbo de su arte. Ya 
que a  su regreso a Paris , en 1761, desarrolló momentáneamente pinturas históricas 



Como es habitual en este arte del siglo XVIII vuelve a ser la mujer la protagonista que, al decir de los Goncourt, ofrece "un recuerdo de Rubens a través del brillo de Boucher", apariencias voluptuosas, a la vez confusas y radiantes, "no parecen vivir más que de un soplo de deseo". Un género que parecía agotado después de infinitas repeticiones a lo Boucher renace en Fragonard con mayor vitalidad si cabe, acompañado de un sugestivo juego de empastes y un ritmo libre, exuberante y endiablado en su pincelada, a base de rápidos brochazos, anuncio de la técnica empleada por algunos pintores románticos.


 Su colorido es claro, luminoso. Los tonos dorados -se ha hablado del pintor de los amarillos- los rosas, se despliegan en sus composiciones con más alegría y calor que los de Boucher.

Mercedes Tamara
16-06-2018



Bibliografia : ArteHistoria
                 

lunes, 11 de junio de 2018

LA REINA MARGARITA DE AUSTRIA A CABALLO DIEGO RODRIGUEZ DE VELÁZQUEZ

LA REINA MARGARITA DE AUSTRIA A  CABALLO 

La reina Margarita de Austria, a caballo,óleo sobre lienzo, 279 x 309 cm.Museo del Prado



Retrato ecuestre de la reina Margarita de Austria (1584-1611), hija del archiduque Carlos de Austria-Stiria y de María de Baviera, y esposa de Felipe III (1578-1621).

Viste basquiña negra bordada con coronas y adornos de plata, jubón blanco, vuelos y gorguera de gasa: en el pecho, el "joyel rico" formado por el diamante "el estanque" y la perla "Peregrina"; tocado con plumas y perlas; montada a mujeriegas en una hacanea castaña y blanca, con una roseta sobre el testuz y gualdrapa ricamente labrada. Fondo de monte, descubriéndose a la izquierda unos jardines con recuadros de boj y fuente en medio. Se trata de los jardines de la Casa de Campo, con la Fuente del Águila (actualmente en El Escorial).

Este lienzo fue pintado para el Palacio del Buen Retiro de Madrid en 1634-1635. El cuadro lo realizó Velázquez con la colaboración de ayudantes, retocándolo el maestro en el último momento antes de su colocación definitiva a la derecha del Trono en el Salón de Reinos. Formaba serie con los retratos ecuestres de Felipe III, Felipe IV, Isabel de Borbón y Baltasar Carlos, y entre todos componían un discurso sobre la continuidad dinástica. El cuadro permaneció allí hasta que, alrededor de 1768, se trasladó al Palacio Nuevo (actual Palacio Real), junto con los demás retratos ecuestres del Salón de Reinos. Para adaptarlo a su nueva ubicación, se le añadieron sendas bandas laterales que han sido retiradas en la reciente restauración. Se cita en su nuevo emplazamiento en los inventarios de 1772 y 1794, pasando a formar parte de las colecciones del Museo del Prado en 1819.

Simbolizando la continuidad dinástica, en el muro occidental del Salón de Reinos se disponían los retratos ecuestres de Felipe III y la reina Margarita de Austria, padres del rey Felipe IV, y en el opuesto se encontraban los retratos de Felipe IV y su esposa, Isabel, mientras que entre ambos y sobre una puerta estaba el de su heredero, el príncipe Baltasar Carlos.




Mercedes Tamara
11-06-2018
Bibliografia : ForoXerbar