martes, 1 de octubre de 2013

LAS MENINAS DIEGO DE VELÁZQUEZ

 LAS MENINAS    1656     
Las meninas
óleo sobre lienzo 318 x 276 cm
Museo del Prado, Madrid



La extraordinaria escena , en apariencia espontánea, pero de hecho repleta de pompas ceremoniales y férreas jerarquías nos permite atisbar la vida de la corte española. El pintor se retrata a sí mismo como favorito real, en llano contacto con la familia regia . Felipe IV y Mariana . Tiene motivos para hacerlo: Velázquez ascendió por el escalafón cortesano hasta llegar a ayudante de cámara del monarca.  Esta sala del Alcazár real comunicaba con los aposentos privados del pintor . Entre sus cargos estaba el de conservador de la pinacoteca real. Cuando en septiembre de 1628, Rubens visitó el país , cabe suponer que Velázquez y él se maravillaron ante los fabulosos Tizianos que Felipe había adquirido hacía poco en Italia. La mayoría de los encargos que Velázquez recibió en calidad de pintor de la corte fueron retratos , un género en el cual no tenía parangón.Se sabe que Felipe IV posó para él en cuarenta ocasiones distintas.

En el centro, aparece la joven infanta Margarita , nacida en julio de 1651, pintada con un vestido de deslumbrante color blanco. Sus sirvientas la rodean, prestándole distintos grados de atención . Un chico juega con el mastín, al cual no parece agradarle mucho que lo empujen con un pie.Velázquez y Margarita se giran con una aparente naturalidad para mirar fuera del cuadro. El espejo de fondo nos revela qué quieren ver la pareja real en carne y hueso. El pintor probablemente se inspiró para ello en el espejo que aparece en el Retrato de Giovanni Arnolfini y su esposa de Van Eyck, por aquel entonces en la pinacoteca real . ¿ Pretende la obra retratar a los reyes o se trata de que éstos aparezcan de paso en la composición ? . Parecería que la figura en el quicio trasero abogara por este último supuesto ya que se trata del aposentador o chambelán de la reina, es decir, el encargado de abrirles la puerta a la pareja real y avisar de su llegada. En cualquier caso, son unos observadores idealizados del cuadro y todo el movimiento gira en torno a ellos . Así era el patronazgo de la corte española: todos los medios estaban al servicio del rey. El monarca, al observar el cuadro, literalmente se estaría mirando a sí mismo.

El hecho de que Velázquez se autorretratase en íntima compañía de la familia real era algo sin precedentes Tenía varios motivos que le acuciaban a hacerlo .En aquel tiempo, anhelaba , una posición mucho más prestigiosa: un título decaballero. Su petición había sido criticada acaloradamente por la nobleza porque no podía probar que fuese descendientes de hidalgos y porque su tarea de pintor era un quehacer manual . Consiguió cartas de recomendación de altos cargos del Vaticano a quienes había conocido durante una visita a Roma con  motivo del jubileo de 1650, cuando retrató al papa Inocencio X , quien le impuso una medalla con cadena de oro en reconocimiento. Puesto que esto no le bastaba para convencer a todo el mundo de lo fundamental de sus pretensiones, es posible que el cuadro fuera un punto a favor . Un contacto con la familia real, como el que en el cuadro se representaba , era algo muy codiciado en la corte y Velázquez , con su obra lo publicitaba. Además, la naturaleza de este enorme lienzo con su ostentosa exhibición de pinceladas y la exactitud de su plasmación espacial, constituía una demostración de que la pintura era algo más que un oficio manual. Declaró que no recibió pago alguno por la obra, la pintó como servicio al rey . Finalmente, en el año 1659 fue nombrado caballero y la cruz de Santiago que aparece pintada en rojo sobre su pecho debió ser añadida entonces. El italiano Luca Giordano pintó la cruz a finales del siglo XVII , se refirió a Las Meninas como una " teología de la pintura ".


Mercedes Tamara
1-10-2013

Bibliografia : 100 Obras Maestras del Museo del Prado, Madrid