sábado, 21 de julio de 2012

BAÑOS DE TÁNGER DE MARIANO FORTUNY

BAÑOS DE TÁNGER 1862
Baños de Tánger
lápiz conté y toques de clarión 24,5 x 27 cm
Museo Nacional de Arte de Cataluña









Davillier sitúa el segundo viaje del pintor a tierras marroquies en el mes de septiembre de 1862. Por espacio de dos meses , hasta el momento de su regreso a Europa , visitará con frecuencia  las dos ciudades norteñas , Tánger y Tetúan , acompañado de un guía autóctono llamado Farragi, que debió de mostrarle los lugares más pintorescos de la región . Entre los escenarios 
más visitados por el viajero occidental , la visión de la casba de la ciudad de Tánger, contemplada desde el zoco , ocupaba un lugar de gran importancia , hasta el punto de convertirse  en una de las imágenes más tópicas y recurrentes del imaginario pictórico orientalista. 




Como si de un veduttista se tratara , Fortuny elige como motivo de su composición , uno de los  paisajes más visitados por los pintores occidentales de su tiempo que llegan a la ciudad en  busca de fuentes de inspiración para su recreación del mito del exotismo cultural . En este  sentido , el pintor mantiene una inquebrantable fidelidad a la visión estereotipada y convencional  del emplazamiento e incluso llega a utilizar un punto de vista muy semejante al utilizado por la  mayoría de los artistas interesados en la representación de este mismo paraje . La escena incluye el movimiento y la agitación de personas y de animales característicos de un lugar destinado a albergar actividades comerciales de diferente signo y naturaleza . 








Al margen de la exactitud topográfica con la que Fortuny representa el escenario , no podemos  dejar de valorar, una vez más , su enorme talento compositivo y, fundamentalmente un virtuosismo técnico sin parangón , capaz de construir una ambientación convincente y verosímil  sin llegar al exceso descriptivo ni al detalle fotográfico , simplemente utilizando , de forma magistral , los recursos instrumentales del quehacer pictórico. 



Aunque Fortuny visitó la ciudad de Tánger en otra ocasión , consideramos que tanto las características estilísticas como su fractura técnica son argumentos que contribuyen a  proponer una cronología para la obra estudiada cercana a su primera visita , realizada  en otoño de 1862. 




Desconocemos si entre los lugares pintorescos visitados por los viajeros de la ciudad  figuraba uno de los baños públicos representados por el autor . En cualquier caso ,  y al margen de este tipo de consideraciones , el pintor lo eligió como motivo temático  para uno de sus dibujos de esta etapa africana . A diferencia de otras manifestaciones  artísticas nacidas del contacto visual con la realidad marroquí , y de las cuales, desafortunadamente , no disponemos de referencias documentales que puedan ayudar 


a identificar algún aspecto concreto de la obra , el dibujo Baños de Tánger ya aparece  citado en la monografía de Sanpere i Miquel del año 1880. El fenómeno más sorprendente  concierne a la certeza con que el autor identifica el escenario dibujado , seguridad , que  se extiende a la cronología de la obra , que la considera una producción del año 1862 


  Mercedes Tamara
21-07-2013
                                             


                                                       


Bibliografía : Mariano Fortuny, Edic Museo Nacional de Arte de Catalunya