lunes, 15 de agosto de 2011

ODALISCA CON ESCLAVA INGRES

ODALISCA CON ESCLAVA 1842


Odalisca con esclava
óleo sobre lienzo 76 x 154 cm
Baltimore Galeria Walters









El siglo XIX experimentó una renovación del gusto por la antigüedad, por la Edad Media y, sobre todo, por lo exótico. Este gusto por lo exótico será una constante en los pintores románticos, pero también podemos encontrar sus temas en artistas como Ingres, que solía considerarse academicista.


 Las imágenes de moros, harenes, batallas en tierras lejanas empezarán a pulular a partir de 1830, sobre todo a raíz de los viajes a Grecia, Tierra Santa y el norte de África. Por otro lado, Ingres sentía debilidad por el desnudo femenino en sí. El cuerpo no podía ser representado por sí mismo, sino que se debía adecuar a un contexto que lo justificase. 


Por ello, serán muy frecuentes - y no sólo en Ingres, también en Delacroix- la representación de harenes o baños turcos. La sensualidad, el colorido y la languidez femenina son estereotipos que se repiten. Ingres realizó auténticos experimentos acerca de la línea y la estructura decorativa de la anatomía. Los estudios se repiten a lo largo de sus obras, y la misma mujer que aparece en este cuadro la encontramos en otros, como el estudio de Mujer Acostada, Mujer con tres brazos o en el propio estudio preparatorio para esta obra.


Ingres pintó a la Odalisca con esclava en un ambiente muy sensual que consigue que los ojos del observador se quede extasiado ante el bello cuerpo de esta odalisca que se encuentra cautiva sin poder salir de ese escenario que es tan bello que parece, sacado de un cuento de las Mil y una noche , pero , sin embargo es una verdadera cárcel para esta odalisca cuyo cuerpo aparece en escorzo dentro de un fondo en el que hay una exquisita gama de colores marrones y grises.


Mercedes Tamara Lempicka 
21-10-2014


Bibliografía :  1001 Pinturas que hay que ver antes de morirse, Edic Grijalbo